¿Cómo sabes que Dios es nuestro proveedor? ¿Alguna vez has sentido que nadie te provee? ¿Cómo aceptar que Dios es mi proveedor? ¿Puede ser Dios mi proveedor?
En muchas historias de la biblia nos podemos dar cuenta que Dios fue el proveedor en situaciones y circunstancias que serían increíbles, recordemos cuando Dios proveyó en el desierto al pueblo de Israel durante 40 años.
Dios se encargó hace mucho tiempo de cuidar a sus hijas e hijos y esa promesa no cambia, Dios también tiene ese cuidado ahora en tiempo presente con nosotras.
Las historias que la biblia nos cuenta nos hace saber cómo Dios fue el proveedor, y cuido de cada una de las personas en las diferentes situaciones.
Muchas veces no vemos a Dios como nuestro proveedor por las situaciones difíciles que estamos pasando especialmente cuando son situaciones financieras complicadas.
Las situaciones difíciles que pasamos no debemos dejar que nos alejan de Dios, sino ahí es donde debemos de confíar que Dios proveerá lo que necesitamos.
En Mateo 6:26 “Fíjense en las aves del cielo: no siembran ni cosechan ni almacenan en graneros; sin embargo, el Padre celestial las alimenta. ¿No valen ustedes mucho más que ellas?”
Con ese versículo Dios nos indica que él cuida de los animalitos y ellos no trabajan para asegurar su futuro, Dios les da y en abundancia.
Confiemos que no importa lo que pase, Dios nos va a proveer, lo que necesitamos, mantengámonos en oración y pidamos que Dios se encargará a su tiempo de proveer.
No te desanimes, ni te desesperes porque Dios no te va a desamparar, confía plenamente en lo que Dios tiene preparado para ti.
Dios es el proveedor por excelencia entonces pide lo que necesitas que Dios proveerá, un trabajo, salud, dinero, paz, etc cualquier cosa que necesites.
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